La regeneración territorial: un desafío para espacios desindustrializados que buscan alternativas de éxito

Paz Benito del Pozo*

El proceso de desindustrialización sufrido en Europa a raíz de la crisis del modelo productivo conocido como “fordista” durante los años de 1970 y siguientes generó no solo desempleo, desinversión y la despoblación de amplios territorios y ciudades que fueron escenario de la industrialización histórica, sino que también tuvo como efecto la multiplicación de ruinas industriales. Por su magnitud y naturaleza estas ruinas, que afectaban a varios cientos de miles de hectáreas, se perfilaron como un verdadero desafío territorial ya que para los solares y edificios abandonados el mercado del suelo no garantizaba de forma espontánea su absorción y reutilización. Además, los suelos industriales improductivos, edificados o no, constituían un riesgo medioambiental y un factor de degradación para las áreas urbanas; también una fuente de gasto para las Administraciones Públicas.

Como solución institucional, y en línea con una estrategia de regeneración territorial que incluía tanto a ciudades como a pequeñas localidades, la Unión Europea diseñó y activó un repertorio de medidas económicas, urbanísticas y legislativas que permitieron desarrollar iniciativas de recuperación y aprovechamiento de suelos y fábricas para dotarlos de algún uso alternativo. La atención al problema de las ruinas industriales se acompañó de una creciente sensibilidad social. Así muchos edificios fabriles, obras de ingeniería y paisajes en precario se salvaron de la extinción, el deterioro o el olvido gracias a merecer, no sin el esfuerzo de colectivos y asociaciones culturales y vecinales, la consideración de verdaderos monumentos. Y como tales, muchos de esos vestigios se han protegido con la declaración de Bien de Interés Cultural o equivalente, figura regulada en España, y otros países de su entorno, por las leyes regionales de patrimonio.

A escala urbana, las intervenciones llevadas a cabo en barrios y espacios fabriles y portuarios abandonados (no siempre de carácter protector) se enmarcan en una estrategia de revitalización de la ciudad que a menudo forma parte de un proyecto de crear ciudad en torno a las industrias obsoletas y de conservar éstas como expresión de la memoria colectiva. En este sentido, la vieja fábrica actúa a la vez como testimonio y como símbolo. Puede afirmarse que las ciudades aprenden en este milenio a interpretar y reutilizar el legado de la industrialización como un recurso. A menudo esas mismas ciudades también reorganizan su estructura productiva en torno a una nueva actividad, el turismo, que se sustenta en acciones sobre ese legado de la industria histórica.

La ciudad de Avilés y su ría, localizadas en el Área Central de Asturias, son un claro exponente de la transformación radical de un territorio sujeto durante décadas a la lógica y los impactos del industrialismo, que engendró una ciudad-empresa de contaminado perfil y una economía urbana de monocultivo siderúrgico. Avilés ha sido capaz, sin renunciar a su pasado industrial, de varios logros importantes de regeneración territorial, entre los que destacan: (a) de regenerar el tejido productivo tras el cierre de su empresa motora, la compañía pública Ensidesa; (b) de crear una imagen de espacio limpio y de bienestar; (c) de redefinir su urbanismo y (d) de posicionarse como un espacio turístico con identidad propia. Esta experiencia, que remite a ejemplos similares en otras zonas del norte peninsular y que se inspira en modelos como Ría Bilbao 2000, debe sus elementos de éxito a una estrategia de política urbanística que prioriza el aprovechamiento de los terrenos industriales abandonados, la descontaminación ambiental y la regeneración del puerto.

Vista general de la ciudad y ría de Avilés, un espacio urbano de tradición siderúrgica en proceso de regeneración funcional, urbanística y medioambiental. Foto cedida por el Ayuntamiento de Avilés tomada en 2013.
Vista general de la ciudad y ría de Avilés, un espacio urbano de tradición siderúrgica en proceso de regeneración funcional, urbanística y medioambiental. Foto cedida por el Ayuntamiento de Avilés tomada en 2013.

También parece acertada la política turística, que adopta una escala supramunicipal basada en la colaboración de las distintas corporaciones locales que forman la Comarca de Avilés para alcanzar, sumando recursos e infraestructuras, un tamaño de polo turístico más competitivo y diversificado que si se limita a la ciudad de Avilés, con una oferta de elementos variados y singulares, entre los que destaca el Centro Cultural Niemeyer y el paisaje urbano-industrial en el que se enmarca. Adicionalmente, la calidad de la ría y su entorno ha mejorado con el plan de saneamiento integral, la renovación de la avenida de Guadalhorce, el Paseo fluvial “Ruta del Acero” y el puerto deportivo. Y cómo no, con la intervención en el Casco Histórico, que recupera y adecenta edificios, calles y plazas.

En este proceso hay, no obstante, algunas sombras, entre ellas, los problemas de gestión y financiación que desde 2012 atenazan a los responsables del Centro Cultural Niemeyer y que han impedido que Avilés se consolide como destino internacional, aspiración que en 2006 parecía más que plausible. Hoy se trabaja con un horizonte más modesto, pero el gran cambio ya es una realidad y Avilés se perfila como un modelo urbano de transformación planificada exitoso en muchos aspectos, mostrando capacidad para revitalizarse y generar actividades alternativas.

Para mayor infor­ma­ción:

BENITO DEL POZO, Paz. Renovación urbana, herencia industrial y turismo: un proceso con elementos de éxito en Avilés (Asturias). Boletín de la Asociación de Geógrafos Españoles, 2016, nº 72, pp. 285-304 [En línea].
http://www.age-geografia.es/ojs/index.php/bage/article/viewFile/2341/2216

* Paz Benito del Pozo es profesora titular de Geografía Humana en la Universidad de León (España) y directora del Grupo de Investigación INVESTER.

Ni vivienda, ni adecuada. Fraccionamiento Yacatitas, Yuriria Guanajuato en México

Tener una vivienda no es sólo una pretensión moral. En México, a partir de las reformas en materia de derechos humanos, disfrutar de una vivienda adecuada se convirtió en una obligación jurídica internacional, pero, ¿realmente se garantiza su acceso con los parámetros mínimos para ser considerada adecuada? Sin duda, la infraestructura, habitabilidad, asequibilidad, localización y el entorno son algunos de los parámetros de la vivienda que no siempre se satisfacen.

Lo cierto es que la vivienda juega un papel importante para la sociedad actual y evidentemente sigue siendo uno de los problemas más comunes que le afectan a la misma; un claro ejemplo son los llamados “sin techo”, que existen en México y en diversas partes del mundo. Aquí surge otra interrogante ¿por qué se sigue construyendo vivienda que no es ni digna, ni adecuada? Parte del problema estriba en las deficiencias y vacíos legales que presentan las leyes; esto genera un marco legal inapropiado y obsoleto que hasta ahora ha dado como resultado, la construcción de viviendas inadecuadas.

Específicamente, en el fraccionamiento Yacatitas, localizado en la periferia de la ciudad de Yuriria, Guanajuato, acceder a una vivienda adecuada se ha convertido en un mero referente de deseos. Esta colonia fue construida en el año 2010 con la participación de los gobiernos federal, estatal y municipal, los dos primeros aportaron cada uno, el 40% de los costos de construcción (esto es, el 80% del total) y el 20% restante, lo aportaron los beneficiarios; el gobierno municipal aportó el predio para su construcción.

A pesar de que se desarrolló con estricto apego a la legislación urbana, el resultado fue la construcción de vivienda de 18.00 m2, conformada por un espacio habitable y un baño; en su entorno las calles no cuentan con banquetas ni pavimentación, además de que en la zona no existen escuelas, hospitales ni tiendas de suministro, y el único parque de la coloni12a se encuentra cercado con malla ciclónica y candados por parte de una fracción de los colonos, entre otras tantas cosas. Esta condición ha ocasionado que los habitantes lleven a cabo reformas para adaptar la vivienda a sus necesidades, sobre todo, si se considera que fueron entregadas a familias de entre 3 a 5 integrantes. Paradójicamente, al programa del gobierno para la construcción del fraccionamiento se le llamo “vivienda digna”.

Asador improvisado para preparar y calentar los alimentos

Fuente: Ileana Jiménez, 2016

¿Que esperaba de su vivienda? En una escuesta realizada a los habitantes del fraccionamiento, manifestaron sentirse satisfechos con el lugar en donde viven, a pesar de su inconformidad ante la calidad de los materiales y presencia de vandalismo; pero valdría la pena preguntarse las condiciones reales en las que vivían anteriormente, al estar, en algunos casos, en situación de pobreza extrema. A pesar de que la vivienda no es adecuada, resulta para los habitantes un gran avance con respecto a tal precariedad en la que vivían.

Condiciones física de las viviendas del fraccionamiento Yactatitas

Fuente: Ileana Jiménez, 2016

Ante este escenario, los habitantes del fraccionamiento Yacatitas, han establecidos redes de colaboración y convivencia más allá del aspecto espacial de la vivienda, lo cual, posiblemente, se debe a que estas relaciones se vuelven imprescindibles para las personas en condiciones de pobreza, pues logran suplir con la convivencia en el exterior el hecho de que la vivienda, y en sí el fraccionamiento no brinde todas las comodidades. Por lo tanto, se da una comunidad al reunirse los vecinos en la calle, sentados en la tierra, compartiendo la comida, o incluso sentados bajo el cobijo de un árbol después de concluir su jornada. La comunidad que se genera, logra aumentar el grado de satisfacción residencial, aun a pesar de que sus viviendas claramente no son adecuadas.

Distintas acciones podrían ayudar a solucionar el problema, sin embargo, establecer en el marco legal urbano los lineamientos claros y precisos para la planificación y construcción de nuevos desarrollos habitacionales, donde la inversión realizada tienda a garantizar la calidad física de la vivienda y las cualidades espaciales del desarrollo, podrían ser la clave de la solución.

Para mayor información

Jiménez Pineda, Luz Ileana (12 de Dic de 2016). Vivienda adecuada y satisfacción residencial, análisis desde el marco legal. Caso de estudio: Fracc. Yacatitias, Yuriria, Guanajuato. Universidad de Guadalajara, Guadalajara, Jal. [Director: Dra. Verónica Livier Diaz Núñez.] Disponible en: http://act.cuaad.udg.mx/es/alumnos/tesisconcluidasmpegpau#J

Luz Ileana Jiménez Pineda, Abogada y Maestra en Procesos y Expresión Gráfica en la Proyectación Arquitectónica Urbana por la Universidad de Guadalajara. Nacida en Guadalajara, Jalisco. Especialista en derecho urbano y diseño de políticas públicas en materia de desarrollo urbano y vivienda. Ha trabajado en el sector público en áreas de desarrollo urbano. Mención especial en el Premio Luciano Parejo de la Unión Iberoamericana de Municipalitas en 2017. Contacto: luzjimenezp@yahoo.com.mx

El mundo rural: retos y temáticas para el nuevo milenio

Ángel Raúl Ruiz Pulpón

Universidad de Castilla-La Mancha

Angelraul.ruiz@uclm.es

En las últimas décadas, el espacio rural está sufriendo importantes transformaciones sociales y económicas. Estos cambios, acelerados por el proceso de globalización, permiten hablar de una nueva dimensión de la ruralidad, con diferentes temas, enfoques, retos y dinámicas que se encuentran en continua interacción y que van más allá del tradicional interés por los aspectos agrarios.

Desde una perspectiva social, interesa la naturaleza compleja de las relaciones entre los ámbitos rurales y urbanos, así como la revalorización del mundo rural que es identificado, cada vez más, con valores como la tranquilidad, lo auténtico, la sostenibilidad, el paisaje, la experiencia vivida, etc., por parte de la sociedad urbana actual. Desde una perspectiva económica, se presta especial atención a la diversificación de actividades, intentando modelizar las nuevas tendencias de localización de industrias y de servicios en el mundo rural, sin olvidar las consecuencias de la globalización de los mercados agroalimentarios que afecta tanto a las formas de producción como a los hábitos de consumo. En suma, temáticas que demuestran el carácter global y multifuncional de estos cambios.

En este contexto general, podemos identificar una serie de temáticas clave que constituyen verdaderos retos para el mundo rural en el futuro más cercano. El primero, y quizás más importante, es el vínculo existente entre alimentación, ética y sostenibilidad.

Desde el punto de vista de la agricultura, los próximos retos pasan por el creciente interés por la calidad de las producciones y por la preocupación por la sobreproducción, el despilfarro, la seguridad alimentaria y el acceso desigual a los recursos alimenticios

Desde el cuestionamiento del actual modelo agroindustrial, existe una tendencia a defender un modelo de desarrollo agrario basado en la calidad de los procesos productivos y en la mejora ambiental, priorizando alimentos ecológicos obtenidos en las proximidades de las áreas de consumo. Además, y desde un punto de vista más ético, se reflexiona sobre las consecuencias medioambientales y territoriales del modelo productivo agroindustrial, como también sobre el alejamiento físico y afectivo de los consumidores respecto al medio rural, dentro de un debate general sobre las relaciones de poder imperantes en el sistema agroalimentario. Esta preocupación ética se manifiesta igualmente en problemas como la generación de excedentes, el debate sobre los cultivos transgénicos, y el despilfarro en la producción y en el consumo de los alimentos en un escenario global donde gana enteros el respeto por la soberanía alimentaria y el desigual acceso a los recursos alimenticios.

Un segundo conjunto de desafíos se derivan de la mayor legitimidad social de los actores que viven y trabajan en el medio rural. Durante décadas, los representantes de los intereses agrarios han sido los principales interlocutores a la hora de tomar decisiones, sin embargo, actualmente esta visión hegemónica está siendo cuestionada no sólo porque existe una mayor prevalencia de los intereses urbanos en una sociedad altamente urbanizada, sino también, porque la sociedad rural es cada vez más plural y socialmente más diversa y heterogénea como consecuencia de las recientes dinámicas demográficas. La articulación de una nueva forma de gobernanza local refrenda la importancia de las formas de participación horizontal y/o ascendente a la hora de diagnosticar y de proponer soluciones a los problemas derivados de las distintas dinámicas productivas, económicas, urbanísticas que se vienen sucediendo en las áreas rurales. Estas dinámicas han ocasionado ventajas, como la conquista de un mayor bienestar colectivo, la mejora en la accesibilidad a los servicios y la difusión de formas de vida urbanas. En contrapartida, los retos a los que se tienen que enfrentar las áreas rurales parecen numéricamente mayores, destacándose, entre todos ellos, la presión sobre la utilización de los recursos y de la energía, la ocupación acelerada del suelo, la especialización funcional productiva, sobre todo de las actividades agrícolas y turísticas, el aumento del coste de los servicios, la presión sobre los recursos naturales, el incremento de las necesidades de movilidad, la pérdida de valores paisajísticos y patrimoniales, la degradación y desaparición de los pueblos, etc.

La sociedad rural es cada vez más plural y socialmente más diversa y heterogénea como consecuencia de las recientes dinámicas demográficas

Por tanto, resulta básica la delimitación y la adopción de un modelo de desarrollo para nuestras zonas rurales que genere menos costes sociales, económicos y ambientales, y que favorezca la sostenibilidad territorial, la eficacia económica, la cohesión social, y el bienestar individual y social de la población. En definitiva, poder vivir en el mundo rural con dignidad.

Para saber más:

RUIZ PULPÓN, Ángel Raúl; TULLA PUJOL, Antoni; MOLINERO HERNANDO, Fernando. La enseñanza de la Geografía Rural en los estudios universitarios de grado en España: temáticas clave, organización y metodologías de trabajo actuales. Biblio3W. Revista Bibliográfica de Geografía y Ciencias Sociales. [En línea]. Barcelona: Universidad de Barcelona, 5 de mayo de 2017, vol. XXII, nº 1.198. [ISSN 1138-9796].

El mundo rural: retos y temáticas para el nuevo milenio

Ángel Raúl Ruiz Pulpón

Universidad de Castilla-La Mancha

Angelraul.ruiz@uclm.es

En las últimas décadas, el espacio rural está sufriendo importantes transformaciones sociales y económicas. Estos cambios, acelerados por el proceso de globalización, permiten hablar de una nueva dimensión de la ruralidad, con diferentes temas, enfoques, retos y dinámicas que se encuentran en continua interacción y que van más allá del tradicional interés por los aspectos agrarios.

Desde una perspectiva social, interesa la naturaleza compleja de las relaciones entre los ámbitos rurales y urbanos, así como la revalorización del mundo rural que es identificado, cada vez más, con valores como la tranquilidad, lo auténtico, la sostenibilidad, el paisaje, la experiencia vivida, etc., por parte de la sociedad urbana actual. Desde una perspectiva económica, se presta especial atención a la diversificación de actividades, intentando modelizar las nuevas tendencias de localización de industrias y de servicios en el mundo rural, sin olvidar las consecuencias de la globalización de los mercados agroalimentarios que afecta tanto a las formas de producción como a los hábitos de consumo. En suma, temáticas que demuestran el carácter global y multifuncional de estos cambios.

En este contexto general, podemos identificar una serie de temáticas clave que constituyen verdaderos retos para el mundo rural en el futuro más cercano. El primero, y quizás más importante, es el vínculo existente entre alimentación, ética y sostenibilidad.

Desde el punto de vista de la agricultura, los próximos retos pasan por el creciente interés por la calidad de las producciones y por la preocupación por la sobreproducción, el despilfarro, la seguridad alimentaria y el acceso desigual a los recursos alimenticios

Desde el cuestionamiento del actual modelo agroindustrial, existe una tendencia a defender un modelo de desarrollo agrario basado en la calidad de los procesos productivos y en la mejora ambiental, priorizando alimentos ecológicos obtenidos en las proximidades de las áreas de consumo. Además, y desde un punto de vista más ético, se reflexiona sobre las consecuencias medioambientales y territoriales del modelo productivo agroindustrial, como también sobre el alejamiento físico y afectivo de los consumidores respecto al medio rural, dentro de un debate general sobre las relaciones de poder imperantes en el sistema agroalimentario. Esta preocupación ética se manifiesta igualmente en problemas como la generación de excedentes, el debate sobre los cultivos transgénicos, y el despilfarro en la producción y en el consumo de los alimentos en un escenario global donde gana enteros el respeto por la soberanía alimentaria y el desigual acceso a los recursos alimenticios.

Un segundo conjunto de desafíos se derivan de la mayor legitimidad social de los actores que viven y trabajan en el medio rural. Durante décadas, los representantes de los intereses agrarios han sido los principales interlocutores a la hora de tomar decisiones, sin embargo, actualmente esta visión hegemónica está siendo cuestionada no sólo porque existe una mayor prevalencia de los intereses urbanos en una sociedad altamente urbanizada, sino también, porque la sociedad rural es cada vez más plural y socialmente más diversa y heterogénea como consecuencia de las recientes dinámicas demográficas. La articulación de una nueva forma de gobernanza local refrenda la importancia de las formas de participación horizontal y/o ascendente a la hora de diagnosticar y de proponer soluciones a los problemas derivados de las distintas dinámicas productivas, económicas, urbanísticas que se vienen sucediendo en las áreas rurales. Estas dinámicas han ocasionado ventajas, como la conquista de un mayor bienestar colectivo, la mejora en la accesibilidad a los servicios y la difusión de formas de vida urbanas. En contrapartida, los retos a los que se tienen que enfrentar las áreas rurales parecen numéricamente mayores, destacándose, entre todos ellos, la presión sobre la utilización de los recursos y de la energía, la ocupación acelerada del suelo, la especialización funcional productiva, sobre todo de las actividades agrícolas y turísticas, el aumento del coste de los servicios, la presión sobre los recursos naturales, el incremento de las necesidades de movilidad, la pérdida de valores paisajísticos y patrimoniales, la degradación y desaparición de los pueblos, etc.

La sociedad rural es cada vez más plural y socialmente más diversa y heterogénea como consecuencia de las recientes dinámicas demográficas

Por tanto, resulta básica la delimitación y la adopción de un modelo de desarrollo para nuestras zonas rurales que genere menos costes sociales, económicos y ambientales, y que favorezca la sostenibilidad territorial, la eficacia económica, la cohesión social, y el bienestar individual y social de la población. En definitiva, poder vivir en el mundo rural con dignidad.

Para saber más:

RUIZ PULPÓN, Ángel Raúl; TULLA PUJOL, Antoni; MOLINERO HERNANDO, Fernando. La enseñanza de la Geografía Rural en los estudios universitarios de grado en España: temáticas clave, organización y metodologías de trabajo actuales. Biblio3W. Revista Bibliográfica de Geografía y Ciencias Sociales. [En línea]. Barcelona: Universidad de Barcelona, 5 de mayo de 2017, vol. XXII, nº 1.198. [ISSN 1138-9796].

Análisis de la demanda de oleoturismo en Andalucía

Francisco Orgaz Agüerai

El oleoturismo es una tipología turística que se relaciona con el mundo del olivo y el aceite de oliva, y que contribuye al mantenimiento del patrimonio cultural y al desarrollo social. El desarrollo del oleoturismo puede generar beneficios importantes para el desarrollo rural como el incremento de los impactos positivos en el área geográfica a partir de nuevas formas de explotación del olivar y el aceite de oliva, y la aparición de sinergias con otros sectores, lo que puede generar nuevos beneficios económicos para las comunidades rurales locales. Además de la conservación de las técnicas tradicionales de producción de aceite de oliva y el desarrollo del turismo gastronómico y del turismo industrial, que a su vez pueden fomentar el desarrollo socioeconómico y sostenible en el destino, lo que favorece la creación de nuevas empresas y empleos cualificados.

El objetivo de este trabajo es analizar el turismo del aceite de oliva desde el punto de vista de la demanda, mediante el conocimiento de la motivación y la satisfacción del visitante de los museos, almazaras y centros de interpretación del aceite de oliva en Andalucía. El área geográfica objeto de la presente investigación es la comunidad autónoma de Andalucía, más concretamente las provincias de Córdoba y Jaén. La metodología de esta investigación ha consistido en la técnica cuantitativa del cuestionario, utilizada para conocer las opiniones, percepciones, valoraciones y el perfil sociodemográfico de las personas que visitan los museos, almazaras y centros de interpretación del aceite de oliva. El trabajo de campo, basado en la realización de encuestas, se desarrolló entre los meses de marzo y octubre de 2014. Se eligieron seis puntos de encuestación (dos almazaras, dos museos del aceite de oliva y dos centros de interpretación) en las zonas oleícolas de Córdoba y Jaén. Una vez cerrado el proceso de recepción de los cuestionarios se procedió al análisis de los mismos mediante el programa informático SPSS 15.0.

TABLA 2. PERFIL SOCIODEMOGRÁFICO DE LOS OLEOTURISTAS.

VariablesPorcentajeVariablesPorcentaje
Sexo (N=394) Hombre Mujer
43,1% 56,9%
Nivel de estudios (N=388) Educación primaria Educación secundaria Educación universitaria
12,6% 35,1% 52,3%
Edad (N=391) Menos de 30 años 30-39 años 40-49 años 50-59 años 60 años o más
14,6% 5,1% 9,7% 16,9% 53,7%
Categoría profesional (N=386) Profesional liberal Asalariado Funcionario Estudiante Ama de casa Jubilado
16,1% 13,7% 10,1% 13,0% 6,7% 40,4%
Renta (N=330) Menos de 700€ De 701-1.000€ De 1.001-1.500€ De 1.501-2.500€ Más de 2.500€
6,1% 6,3% 23,7% 32,7% 31,2%
País de procedencia (N=401) España Francia Reino Unido Alemania Otros
43,1% 28,2% 11,7% 6,2% 10,8%

Fuente: Elaboración propia.

Entre las principales características sociodemográficas (tabla 1) de los oleoturistas encuestados, se desprende que la distribución por sexo es homogénea si bien el porcentaje de mujeres es ligeramente superior al de hombres. En cuanto a la edad del turista que practica este tipo de turismo más de la mitad de personas pertenecen al grupo de mayores de 60 años. En lo que respecta al nivel de formación se puede afirmar que se trata de un turista con estudios universitarios. Este tipo de turista además es jubilado y cuenta con un nivel de ingresos alto. España es el país que más visitantes aporta seguido de Francia y Reino Unido. La mayoría de oleoturistas encuestados nunca habían visitado la zona geográfica donde se realizó la encuesta, la forma de viajar es con compañeros de trabajo o amigos y con pareja y decidieron realizar el viaje por experiencia propia o por la recomendación realizada por amigos y familiares. En cuanto al tiempo de permanencia en destino, se produce una estancia de tres a siete días. En lo que respecta al consumo de aceite de oliva por parte de los turistas que practican oleoturismo, el oleoturista es una persona que consume aceite de oliva todos los días.

El principal motivo para visitar las almazaras, museos y centros de interpretación del aceite de oliva por parte del viajero es aprender sobre el mundo del aceite de oliva. Comer y beber productos de la zona y el entretenimiento también se configuran como motivos de importancia para determinar la visita. Otras motivaciones como el probar productos de la tierra o simplemente la desconexión de la rutina también fueron muy valoradas por los turistas encuestados. Como contrapunto, los oleoturistas no son personas que viajan por motivos de trabajo o con la motivación de visitar amigos o familiares. La hospitalidad es el elemento mejor valorado de los destinos de oleoturismo en Andalucía seguido de la conservación de las infraestructuras. Si bien, un gran número de ítems fueron valorados con puntuación muy similar, aproximándose a los cuatro puntos, lo que pone de manifiesto que las instalaciones relacionadas con el oleoturismo gozan de la aprobación por parte de los visitantes y el grado de satisfacción es alto. Elementos como la conservación, la restauración, la limpieza del lugar, el alojamiento, la información o el precio del viaje son variables muy destacadas por los turistas. Por último, cabe destacar que el nivel de conocimiento del mundo del aceite y la motivación del viaje muestran un nivel de correlación bajo con respecto al grado de satisfacción general.

Entre las principales conclusiones, destaca que la cultura del aceite de oliva es muy valorada fuera de las fronteras españolas como así se desprende de los resultados del estudio, donde la segunda motivación del oleoturista ha sido conocer acerca del mundo del aceite de oliva. Esto lo corrobora el hecho de que el oleoturista es una persona consumidora de aceite de oliva a diario. Pero, el oleoturismo aún debe ser protagonista de una importante promoción por parte de entes públicos con la colaboración privada.

Para mayor información:

ORGAZ AGÜERA, Francisco, MORAL CUADRA, Salvador, LÓPEZ-GUZMÁN, Tomás, CAÑERO MORALES, Pablo. Estudio de la demanda existente en torno al oleoturismo. el caso de Andalucía. Cuadernos de Turismo, 2017, nº 39, p. 437-453.

i Francisco Orgaz Agüera es Vicerrector de Producción e Investigación Científica de la Universidad Tecnológica de Santiago, República Dominicana.

Presentación periodística del artículo: Financiación de proyectos culturales con fondos de la Política de Cohesión Europea: análisis y experiencias en Andalucía 2007- 2013

El texto reflexiona en primer lugar sobre las relaciones entre cultura y desarrollo, considerando diferentes dimensiones del desarrollo, más allá del crecimiento económico, en las que la cultura juega un importante papel tanto por sus valores intrínsecos e intangibles para el refuerzo de la identidad y la mejora de la cohesión social, como por su capacidad para incidir en el aumento del turismo y el atractivo del territorio mediante la puesta en valor del patrimonio cultural, la mejora de las infraestructuras culturales y la capacidad de innovación de los sectores creativos. El interés de los recursos culturales y patrimoniales radica además en gran parte, en que a diferencia de otros están vinculados directamente con un espacio y una población determinada, no es posible deslocalizarlos, lo que los convierte en especialmente relevantes para generar procesos de desarrollo territorial (Caravaca et al., 2013).

Esta vinculación de las inversiones en proyectos culturales con el desarrollo territorial justifica en gran medida la atención prestada a la cultura por parte de la política regional de la Unión Europea. La actual Política de Cohesión Económica y Social se pone en marcha a finales de los años 70 para paliar las diferencias en los niveles de desarrollo de las diferentes regiones de la Unión y se ha convertido en la actualidad en uno de los pilares básicos de la política europea, tanto por su volumen – un tercio del presupuesto comunitario – como por su enfoque territorial y su incidencia en todos los sectores que pueden favorecer el desarrollo regional, desde las redes de transporte a las infraestructuras educativas, tecnológicas, o culturales.

En este marco de referencia, nuestro estudio tiene por objetivo analizar el papel que ocupa la cultura en la Política de Cohesión europea tanto a nivel global como de manera específica en Andalucía, identificando las líneas de financiación que han estado disponibles en el Programa Operativo del Fondo Europeo de Desarrollo Regional, FEDER, Andalucía 2007-2013 y dando a conocer buenas prácticas financiadas en Andalucía durante este período.

El artículo realiza una revisión pormenorizada de los diferentes Ejes y categorías de gastos, CG, en que se estructura el citado Programa Operativo FEDER Andalucía 2007-2013 identificando las que han financiado proyectos y actuaciones en el sector cultural durante este período. Este análisis nos ha permitido constatar cómo junto a las dos CGs dedicadas al patrimonio y los equipamientos culturales incluidas en el Eje 5, existen otros ejes y CGs, en los que se incluyen actuaciones de interés para el sector cultural, con gran potencial de generar innovación y desarrollo, como las realizadas en el sector de las nuevas tecnologías o en el de la internacionalización de empresas culturales.

Esta revisión nos ha permitido hacer una valoración sobre las oportunidades de financiación para el sector cultural que ofrecen los fondos de la política de cohesión europea, entre las que destacamos:

  • La amplitud de líneas de financiación disponible
  • Diversidad tipológica: desde proyectos de restauración y rehabilitación, creación de rutas culturales, financiación de plataformas de digitalización o comercialización de bienes y servicios culturales, etc.;
  • Incidencia en todos los subsectores de la cultura: patrimonio, editorial, flamenco, audiovisual…;
  • Inversiones de diferente escala, desde subvenciones a pymes a grandes infraestructuras o proyectos de regeneración urbana;
  • Enorme número de beneficiarios directos e indirectos
  • Amplio alcance y representatividad territorial
  • Impacto internacional de gran nº de inversiones
  • Efectos indirectos en otros sectores: educación, turismo, medioambiente…
  • Creciente presencia de actuaciones en el ámbito de la economía del conocimiento

En relación con los procedimientos de planificación, ejecución y seguimiento de estas ayudas, podemos apuntar una serie de retos tanto para la mejora de su impacto en el territorio como para la accesibilidad de los agentes culturales a los mismos:

  • La necesidad de simplificar la compleja arquitectura institucional de los fondos;
  • la necesidad de mejorar los procesos de gobernanza aumentando la participación tanto de profesionales de la cultura como de la población beneficiaria implicada;
  • la necesidad de realizar estudios previos de viabilidad de los proyectos que pongan las bases de su futura sostenibilidad;
  • los derivados del régimen de cofinanciación y el pago de las ayudas una vez realizado y justificado el gasto, que genera numerosos problemas a las pymes culturales.

Este trabajo abre la puerta a posteriores estudios que permitan analizar el impacto sociocultural de estos proyectos sobre el terreno y valorar, más allá del nivel de ejecución del gasto, si las iniciativas realizadas han servido verdaderamente de palanca para el desarrollo regional, objetivo prioritario de la política de cohesión europea.

Para mayor información:

Tassara Andrade, P. (2017). Financiación de proyectos culturales con fondos de la Política de Cohesión… Cuadernos Geográficos 56(1), 53-75

http://revistaseug.ugr.es/index.php/cuadgeo/index

La autora Pilar Tassara Andrade, es miembro del Grupo de Investigación Desarrollo Regional y Urbano, GDRU, de la Universidad de Sevilla en el que prepara su tesis doctoral, y trabaja para la Agencia Andaluza de Instituciones Culturales.

Os incêndios de junho em Portugal – uma leitura geográfica da catástrofe

Sérgio Claudino*

Nunca visitei Pedrógão Grande, onde eclodiu o incêndio, nem Castanheira de Pera e Figueiró dos Vinhos, municípios vizinhos, integrados na Região de Leiria, igualmente muito afetados pelo fogo – que, entretanto, se estendeu a outros municípios, como Oleiros e Góis.

Quadro 1 – Indicadores de demográficos e económicos 2015


Pop. Absol.Dens. Popul.Saldo naturalÍndice de envelhec.Poder de compra per capita
Pedrógão Grande358527,8-4827569
Castanheira de Pera328942,4-4337070
Figueiró dos Vinhos637433,6-5831570 a)
Oleiros588511,3-11258162 a)
Góis400115,2-4230367 a)
Portugal10358076112,3-23039144100
  1. Valores de 2013 Fonte: Instituto Nacional de Estatística, www.ine.pt

Este são municípios do “Pinhal Interior”, em que domina a floresta de eucaliptos e pinheiros. Possuem uma limitada população, baixa densidade populacional, estão em perda de população, com uma população extraordinariamente envelhecida – da mais envelhecida em Portugal (Quadro 1) e, mesmo, na União Europeia. Enfim, é uma população com reduzido poder aquisitivo.

Nestes concelhos repulsivos, periféricos, a floresta vai tomando conta das parcelas de terra que deixam de ser cultivadas.

Nestes concelhos repulsivos, periféricos, a floresta vai tomando conta das parcelas de terra que deixam de ser cultivadas. O facto de terrenos perderem pastos, cereais, hortas e passarem a ter mato e floresta, facilita a progressão dos incêndios.

O incêndio iniciou-se, aparentemente, por causas naturais: no sábado houve condições anormais de temperaturas elevadas (mais de 40ºC) e grande secura do ar; o incêndio terá começado com uma trovoada seca, em que um raio atingiu uma árvore, que pegou fogo. Os ventos fortes espalharam o fogo em várias direções.

Muitos dos mortos em consequência do incêndio faleceram nas suas viaturas: ou na estrada nacional que liga Figueiró dos Vinhos a Castanheira de Pera (e aí reside a grande questão deste grande incêndio, se esta estrada nacional não deveria ter sido cortada ao trânsito mais cedo, no passado sábado) e/ou eram habitantes de pequenas aldeias ameaçadas pelos fogos, que pegaram nos seus carros e tentaram fugir, frequentemente com árvores incendiadas a caírem sobre os próprios carros. Em geral, sobreviveram as pessoas que ficaram nas aldeias, aproveitando os espaços conhecidos.

No Verão, em Portugal, são infelizmente habituais estas tragédias, quando as temperaturas são elevadas e a humidade reduzida, como é caraterístico do clima mediterrânico. Contudo, estes incêndios são os mais mortais de sempre no país. Há um problema que é habitualmente reconhecido: a falta de ordenamento territorial das áreas atingidas e, em particular, de ordenamento florestal. Enquanto a floresta se expandir sem controlo, se aproximar das populações, sem limpeza do substrato arbóreo, sem uma vigilância adequada contra incêndios e sem recursos técnicos e humanos suficientes para acudir aos incêndios, este drama português ameaça perpetuar-se.

Há muita geografia por detrás da atual catástrofe dos incêndios em Portugal.

*Professor do Instituto de Geografia e Ordenamento do Território da Universidade de Lisboa

Fluxos e experiências de catadores de materiais recicláveis

Ari Rocha da Silva*

Indivíduos que vivem de materiais descartados no lixo são cada vez mais presentes em diferentes cidades do mundo. Podem ser vistos catando de diversas formas, coletando materiais em lixeiras ou jogados nas ruas, em estabelecimentos comerciais e/ou em grandes depósitos de lixo. Torna-se cada vez mais importante compreender as lógicas e ações desses trabalhadores na medida em que se constituem paisagem cotidiana em nossas cidades.

Catador de rua na cidade de Passo Fundo. Abril, 2015 (fonte: acervo do autor)
Catador de rua na cidade de Passo Fundo. Abril, 2015 (fonte: acervo do autor)

Os catadores de materiais recicláveis são parte dos fenômenos de reestruturação do trabalho em ordem mundial e de crises econômicas cíclicas do sistema capitalista. Ou seja, de processos intensos de reconfigurações das lógicas de produção e consumo em escala global e, consequentemente, de novas definições das práticas e participações da mão-de-obra empregada, seja nas indústrias ou no trabalho agrícola. Atribui-se a isso, os fenômenos de migrações e a falta de ocupações laborais a uma parcela populacional expressiva de indivíduos que sofrem as transformações do mercado de trabalho e se tornam responsáveis a ajustarem-se a novas realidades laborais.

No Brasil, dados do Relatório do Instituto de Pesquisa Economica Aplicada destacam que existem 300 mil catadores exercendo esta profissão, sendo apenas 10% deles organizados em cooperativas ou associações de trabalho. Por outro lado, o Movimento Nacional de Catadores de Materiais Recicláveis (MNCR) afirma que existem mais de 600 mil catadores distribuídos pelo país, o dobro do que é assinalado pelo IPEA.

Os catadores de materiais recicláveis são parte dos fenômenos de reestruturação do trabalho em ordem mundial e de crises econômicas cíclicas do sistema capitalista.

De qualquer forma, tudo indica uma crescente expansão desta categoria de trabalhadores no Brasil, seja na forma do trabalho informal, onde os catadores trabalham individualmente, sem registro formal ou carteira profissional assinada, ou compondo grupos cooperados de trabalhadores, muitos deles assistidos por uma rede de técnicos de organizações não governamentais a base de algum financiamento público ou política pontual de governo, seja ele municipal, estadual e/ou federal.

Empreendimento familiar de reciclagem em Passo Fundo. Julho, 2015 (fornte: acervo do autor)
Empreendimento familiar de reciclagem em Passo Fundo. Julho, 2015 (fornte: acervo do autor)

Há que se considerar, dessa forma, que estes trabalhadores exercem uma categoria emergente e particular nas formas de trabalho. São identificados por alguns governos ou população, em geral, como elementos fundamentais das políticas de revigoramento do meio ambiente e agentes de preservação ambiental; por outros, são considerados sujeitos inexpressivos e marginais que atrapalham a mobilidade urbana e tornam o visual da cidade contrastante e empobrecido. Evidentemente que tais concepções são matizadas por ideologias das formas de se organizar uma cidade e de sua funcionalidade, isto é, a quem ela se destina precipoamente.

Contudo, os catadores não são meros produtos das estruturas sociais e econômicas, são sujeitos plurais e carregados de disposições sociais amealhadas ao longo de suas trajetórias de vida. Não se limitam apenas a catação de materiais na medida em que são permeáveis a aproveitarem as oportunidades e criar outras possibilidades de atuação na sociedade a partir das relações que desenvolvem nela. Assim, não podemos definí-los apenas como sujeitos precarizados e produto de uma lógica econômica perversa, mas como atores ativos e integrados às sociedades em que vivem e trabalham.

… catadores … são sujeitos plurais e carregados de disposições sociais amealhadas ao longo de suas trajetórias de vida.

O texto abaixo, para maiores informações, destaca determinadas práticas de organização do trabalho de catadores vinculados a suas famílias, sendo essa também uma instituição usada tática e estrategicamente pelos catadores para conformar as suas ações e divisões do trabalho social. Denota-se o quanto as ações dos indivíduos é permeada por delineamentos que estão até mesmo fora da lógica, eminentemente, funcional da atividade laboral que exercem, pois suas ações também correspondem a valores e representações que configuram suas disposições sociais nos fluxos de outras experiências, seja na família, nos grupos comunitários ou nas relações mais amplas que tais atores estabelecem e que ajudam a configurar os espaços de suas práticas e a cidade como um todo.

Para maior informação:

SILVA, Ari. R. da. Família e poder nos espaços de trabalho e das trajetórias urbanas. Revista NEP (Núcleo de Estudos Paranaenses) Curitiba, v.2, n.2, pp. 447-64, maio 2016. http://revistas.ufpr.br/nep/article/view/47002

Movimento Nacional dos Catadores de Materiais Recicláveis http://www.mncr.org.br/

IPEA – Situação social das catadoras e dos catadores de material reciclável e reunilizável http://www.ipea.gov.br/agencia/images/stories/PDFs/situacao_social/131219_relatorio_situacaosocial_mat_reciclavel_brasil.pdf

* Ari Rocha da Silva é Sociólogo. Doutorando em Ciências Sociais pelo PPG em Ciências Sociais da Universidade do Vale do Rio dos Sinos (Unisinos), São Leopoldo, Brasil.

Ficha bibliográfica:

SILVA, A. R. Fluxos e experiências de catadores de materiais recicláveis.

LOS NUEVOS INTERESES DE LAS CIUDADES MEDIAS ESPAÑOLAS DENTRO DE EUROPA Y LA GLOBALIZACIÓN

Autor: Fco. Sergio Campos-Sánchez*

A lo largo de las últimas décadas, los asuntos que tradicionalmente han centrado el debate abierto en torno a las ciudades medias españolas han cedido protagonismo en favor de otros aspectos. Estos últimos están más relacionados con las preocupaciones de la sociedad contemporánea actual dentro de un contexto europeo y un mundo más globalizado, lo que puede ser útil a la planificación y a la agenda política de estas ciudades.

Paralelamente, la necesidad reconocida de un desarrollo urbano sostenible y la consciencia de que la solución al problema ecológico se encuentra mayormente en las ciudades, ha dado lugar a un tipo de planeamiento emergente. Esta nueva planificación ha de tener un impacto estratégico en la toma de decisiones sobre los asuntos que de una u otra manera nos afectan a todos los ciudadanos, y que es responsabilidad de las distintas partes interesadas (políticos, profesionales, administraciones, ciudadanía, etc.).

Desde un punto de vista técnico, los problemas de decisión tienen que ver con el enfrentamiento de varios criterios entre sí a la hora de buscar la alternativa idónea. Para ello se debe establecer previamente la importancia relativa de cada criterio y una relación preferencial entre las alternativas identificadas. Existen herramientas de ayuda a la toma de decisiones, como por ejemplo las técnicas estadísticas basadas en los métodos de Análisis Multicriterio (AM), ya usadas con éxito anteriormente en el ámbito de la planificación. Los criterios y las alternativas que estas herramientas pueden manejar tienen que ver directamente con los asuntos de mayor importancia que intervienen actualmente en el diseño (socioeconómico, político, urbano) de las ciudades medias españolas.

Se abre por tanto la incógnita de cuáles son los intereses o temáticas más influyentes en las decisiones que afectan a este tipo de ciudades recientemente. Además de precisarlas, será necesario agruparlas y caracterizarlas para ganar operatividad a la hora de trabajar con ellas. También será útil determinar bajo que enfoque se plantean y a que dimensión de la sostenibilidad (ambiental, social, económica, gobernanza) contribuyen, así como concretar la importancia relativa de cada una de ellas.

Se detectan temáticas distintas (véase Figura 1): unas más concretas y otras de mayor amplitud, ligadas a aspectos cuantitativos o cualitativos, más o menos citadas por las investigaciones existentes a tal efecto, pero todas englobadas dentro de alguno o varios de los enfoques existentes, fundamentalmente ligados al desarrollo socioeconómico. Igualmente, cada una de estas temáticas se puede clasificar en función de la dimensión sostenible a la que contribuyen, pudiendo encontrar algunas que lo hacen en varias de ellas a la vez.

Figura 1. Temáticas de interés actual en las ciudades medias españolas.

Figura 1. Temáticas de interés actual en las ciudades medias españolas.


Figura 1. Temáticas de interés actual en las ciudades medias españolas.

Fuente: elaboración propia.

Los indicadores bibliométricos nos pueden ayudar a establecer una correlación entre estos intereses y las investigaciones más importantes que sobre ellos se han llevado a cabo en los últimos años. Proporcionan además información sobre los enfoques, las dimensiones a las que pertenecen y la variabilidad de la importancia relativa de cada temática a lo largo del tiempo. Algunas de estas investigaciones se encuentran centradas en unos pocos aspectos que desarrollan en profundidad, mientras que otras se caracterizan por tratar un mayor número de ellos de manera más superficial, siendo todas igualmente válidas en la aportación de conocimiento sobre las ciudades medias españolas.

En las últimas décadas aumenta en general la complejidad en las demandas de estas ciudades. Se constata una disminución del interés por asuntos clásicos relacionados con la talla, el rango, la función, o la dotación de servicios básicos. Aumenta sin embargo la atención por el desarrollo socioeconómico y territorial, la acumulación de conocimiento e innovación, o la incorporación de servicios especializados. Igualmente, las investigaciones existentes al respecto, temáticamente más sesgadas con anterioridad, son ahora más holísticas e incorporan metodologías avanzadas.

Un alto porcentaje de las temáticas contribuyen a la dimensión económica de la sostenibilidad, seguida de la ambiental, y se engloban bajo un enfoque desarrollista. Dentro de este marco, algunas de las temáticas más atendidas son, por ejemplo: redes, aspectos sociales y calidad de vida, recursos endógenos, escala local/global, partes interesadas, vertebración territorial, movilidad y transporte, competitividad e innovación.

Estos datos son, en cierta medida, representativos de las políticas europeas que han influido sobre estas ciudades en los últimos años. Si a principios del siglo XXI la Agenda de Lisboa (2000) proyectó los futuros escenarios políticos y económicos europeos en las regiones metropolitanas, enfoque matizado mediante la Declaración de Gotemburgo (2001) que incorpora la sostenibilidad al desarrollo territorial, será unos años más tarde cuando la Red de Observación de la Ordenación Territorial Europea (ESPON, 2006) llame la atención sobre el papel de las ciudades medias en Europa. Para estas ciudades, el desarrollo económico vendrá dado mayormente mediante la promoción de redes de cooperación nacional e internacional entre ellas, lo que repercutirá además en su prosperidad y calidad de vida.

Para mayor información:

CAMPOS-SÁNCHEZ, F.S. 2017. Ciudades medias españolas siglo XXI. Revisión y análisis bibliométrico de enfoques y temáticas predominantes. Cuadernos Geográficos, 56(1), 217-241. ISSN 0210-5462 | E-ISSN 2340-0129

Disponible en: http://revistaseug.ugr.es/index.php/cuadgeo/article/view/3960/5316

*Fco. Sergio Campos-Sánchez es profesor de urbanismo en la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Granada, Departamento de Urbanística y Ordenación del Territorio de la Universidad de Granada (España). E-mail: scampos@ugr.es

Los subsidios agrarios y cohesión socio-territorial en Andalucía.

Eugenio Cejudo García; Francisco Navarro Valverde y José Antonio Cañete Pérez*.

El Subsidio de Desempleo Agrario (SDA) y la Renta Agraria (RA)han propiciado el mantenimiento del tejido poblacional y social de los espacios rurales andaluces aquejados por un histórico desempleo estructural. Este hecho es de vital importancia en un contexto marcado por su vaciamiento demográfico, su abandono y el incremento de las desigualdades agudizadas por la actual crisis. Además, ha permitido, y lo sigue haciendo, la reparación del derecho, históricamente subordinado al varón, de la mujer rural a la cotización por su trabajo en el sector agrario y, derivada de ella, al posterior cobro de una pensión que le permita una vida digna en estos espacios. Tiene gran interés analizar la distribución territorial de los perceptores del SDA y de la RA en Andalucía y mostrar sus implicaciones geo-poblacionales.

Históricamente, los subsidios surgen como una necesidad social en auxilio de una población agraria andaluza y extremeña que padecía, y aún sigue sufriendo, un fuerte desempleo estructural que triplicaba la media nacional. Ello genera un mercado de trabajo agrario muy segmentado, con un fuerte monopolio de la oferta de trabajo en manos de los grandes propietarios de tierras. Su aparición en 1984 regulariza y normativiza el cobro de una prestación por desempleo que no encontró encaje en el Régimen General de la Seguridad Social española del momento, estableciéndose como prestaciones “no contributivas” dentro del Régimen Especial Agrario. Ello transforma las históricas ayudas ligadas a la “caridad” o a situaciones de “conflictividad social” en un derecho regulado para los trabajadores eventuales agrarios que, en la actualidad, perciben, en el conjunto de las dos Comunidades Autónomas, unas 200.000 personas.

Territorialmente,su incidencia es crucial en los municipios de menor tamaño, menos de 2.000 habitantes. De hecho, el porcentaje de afiliados agrarios que las cobran llegan a suponer el 40,4 por ciento en los municipios comprendidos entre 0 y 499 habitantes y el 41,1 por ciento si de 500 y 999 habitantes hablamos. Otro dato a tener en cuenta es que, en casos como la Subbética olivarera, sus beneficiarios superan el 10 por ciento, llegando incluso al 20 por ciento de la población comprendida entre 15-64 años en municipios de entre 1.000 y 5.000 residentes.

Socialmente, el colectivo afectado está fuertemente feminizado y envejecido aunque existen diferencias importantes entre los que cobran el SDA y la RA. En los segundos sigue primando la mujer pero el grupo es más joven. Ella se convierte en mayoritaria desde mediados de la década de los 90 suponiendo hoy el 65% del total. Su presencia se refuerza conforme mayor es el tamaño de los municipios. El envejecimiento del colectivo afecta por igual a hombres y mujeres, siendo más acusado en ellas que en ellos.

El círculo vicioso del desempleo estructural no se ve frenado. Sus perceptores son la mitad del año jornaleros y la otra mitad subsidiados agrarios lo que hace que se conviertan en esenciales para personas sin apenas formación y sin perspectivas laborales en otros sectores en estos territorios. Ayudan a entender la dualidad del agro andaluz que contrapone a una agricultura intensiva en el litoral (Costas de Almería y Huelva) que se nutre de una masa laboral inmigrante con precarias condiciones de trabajo frente a una agricultura subsidiada interior (zonas olivareras de las Subbéticas de Sevilla, Córdoba, Granada y Jaén) que mantiene una importante mano de obra eventual, en parte, gracias a las ayudas de la Política Agraria Comunitaria y al cobro del SDA y de la RA.

En síntesis, el SDA y la RA ha jugado una importancia territorial trascendente tanto en el manteamiento de la estructura de los asentamientos que configuran el territorio andaluz como por beneficiar a un colectivo fuertemente feminizado, saldándose así parte de una deuda histórica que, en términos de género, han padecido las jornaleras andaluzas posibilitando, además, el acceso a una merecida y digna jubilación.

Como agenda de trabajo, dos cuestiones. De un lado, se observa un repunte en el incremento de los perceptores de estas prestaciones a partir de 2009, lo que nos induce a plantearnos el papel que el sector agrario y la percepción de estas prestaciones está jugando como refugio/salida de la crisis. De otro, la cada vez mayor presencia de extranjeros entre sus beneficiarios, lo que las podría estar convirtiendo en un importante mecanismo de fijación espacial e integración social de este colectivo dentro del mundo rural.

Para mayor información:

CEJUDO, E., NAVARRO, F. y CAÑETE, J.A. (2016): “Evolución y distribución territorial de los trabajadores eventuales agrarios subsidiados en Andalucía”. Boletín de la Asociación de Geógrafos Españoles, nº 72, 117-147.

http://www.age-geografia.es/ojs/index.php/bage/article/viewFile/2334/2202

*. Profesores pertenecientes la Dpto. de Geografía Humana de la Universidad de Granada.

Ilustraciones.

Subsidiados agrarios respecto de la población comprendida entre los 15 y 64 años 2015 (porcentaje).

Subsidiados agrarios respecto de la población comprendida entre los 15 y 64 años 2015 (porcentaje).
Fuente: Anuarios de Estadísticas Laborales del MTIN. Elaboración propia.
Fuente: Anuarios de Estadísticas Laborales del MTIN. Elaboración propia.