Jesús Moreno Arriba*
En este artículo de investigación se presenta un emergente proyecto ecoturístico indígena endógeno de gestión de recursos naturales en la Reserva de la Biosfera de los Tuxtlas (en adelante RBLT). A partir de un propositivo abordaje metodológico que incorpora técnicas -cualitativas y cuantitativas- propias de la Geografía y de la Antropología (“Geoantropología”), se ha identificado, documentado y analizado un proyecto de ecoturismo indígena y campesino alternativo al desarrollo convencional eurocéntrico y neocolonialista hegemónico.
Esta incipiente experiencia, llevada a cabo en el Ejido López Mateos (Catemaco, Veracruz, México), en donde predomina la población campesina de autoadscripción indígena Nahua y Popoluca, denota cierta capacidad para contribuir a mejorar la precaria realidad -ecológica, demográfica y socioeconómica- de las comunidades rurales indígenas y campesinas de la región veracruzana de Los Tuxtlas. En este sentido, este proyecto endógeno de ecoturismo indígena en espacios socionaturales protegidos, se revela como un ejemplo real de implementación de un conjunto de buenas prácticas socioambientales alternativas para, desde la praxis, construir puentes y repensar otro modelo posible de desarrollo.
El área geográfica objeto de este estudio, la región de Los Tuxtlas y la Sierra de Santa Marta, se localiza en el sureste del estado mexicano de Veracruz. Este espacio ecosocial, de elevada biodiversidad, pero frágil equilibrio ecológico, se encuentra configurado por una serie de formaciones montañosas volcánicas tropicales sobre el litoral veracruzano del Golfo de México (figura 1).
En todo el territorio tuxteco y serrano, una gran diversidad de ecosistemas y tipos de vegetación, así como un rango altitudinal entre el nivel del mar y los 1.550 msnm del volcán Santa Marta, le confieren a la región un rango de alta biodiversidad. Sin embargo, durante la segunda mitad del siglo XX ha prevalecido un proceso denominado subdesarrollo sostenido. Esta noción hace referencia a las políticas gubernamentales que han acelerado el subdesarrollo histórico, mediante el apoyo tanto a programas de desarrollo ganadero paternalistas y asistencialistas como de extractivismo forestal no sustentable.
El impacto más dramático de estas acentuadas transformaciones en los usos del suelo tradicionales, a raíz del intenso ritmo de colonización antrópica y de ganaderización del sector primario, ha sido la brusca deforestación ocurrida entre la década de los cincuenta y finales del siglo XX (figura 2).
Además, en los últimos lustros se han cerrado las tres válvulas de escape que permitían cubrir el déficit de tierras y alimentos en la región. Estas eran: la migración a las ciudades del eje industrial petroquímico Acayucan-Jáltipan-Minatitlán-Coatzacoalcos, en el Sur de Veracruz (figura 1); el cultivo y comercialización de café; y el uso comunal de tierras ejidales. A su vez, el crecimiento demográfico sostenido está originando problemas de sobrepoblación. Por ello, los procesos de migración-expulsión rural, tanto a escala estatal, como nacional y transnacional, son un fenómeno que se intensifica y adquiere gran trascendencia en todo el ámbito de la RBLT, con la compleja problemática que ello conlleva para los/as migrantes y sus familias, tanto en los lugares de partida como de llegada.
Sin embargo, en el Ejido López Mateos, a través de un proceso endógeno iniciado en 1993 con el apoyo técnico de una ONG local, el Proyecto Sierra de Santa Marta (PSSM), se constituyó legalmente la Sociedad de Solidaridad Social (SSS) “Cielo, Tierra y Agua Selva-Reserva del Marinero”. Con esta figura se promovió la participación activa de las familias de la comunidad en esta asociación ecoturística comunitaria ejidal (figura 3). En los albores del siglo XXI, el ecoturismo ya generaba en torno al 30% de los ingresos del ejido, como parte de una estrategia de diversificación productiva y de complementariedad de rentas. De este modo, a diferencia de otras comunidades de la RBLT en donde la emigración se incrementa, en López Mateos este fenómeno migratorio es hoy prácticamente inexistente.
Figura 3. Algunas imágenes de los y las integrantes locales del proyecto de ecoturismo comunitario indígena campesino Selva del Marinero “Cielo, Tierra y Agua” y de varias de sus infraestructuras ecoturísticas.
En conclusión, se ha constatado que para trascender el modelo de desarrollo convencional y mejorar verdaderamente la vida de las personas es necesario fijar la atención en las prácticas, saberes e imaginarios locales. Es decir, en los márgenes del sistema, en las culturas locales realmente existentes pero invisibilizadas por la meta del discurso desarrollista neoliberal. En suma, este caso de estudio ayuda a repensar cómo podría ser otro modelo de desarrollo sin renunciar a las propias categorías ecoculturales de las poblaciones locales. En este sentido, estos alentadores ejemplos deberían reproducirse de forma creciente en los próximos años. Para este fin, esta investigación quisiera realmente poder aportar su pequeño grano de arena.
Para mayor información
MORENO ARRIBA, Jesús. Medio socioambiental y ecoturismo en la Reserva de la Biosfera de Los Tutxtlas (Veracruz, México): una posible alternativa al desarrollo. Cuadernos de Geografía: Revista Colombiana de Geografía, 26, p. 327–353, 2017. Disponible en <https://revistas.unal.edu.co/index.php/rcg/article/view/57461>. [ISSN electrónico 2256-5542. ISSN impreso 0121-215x]. DOI: 10.15446/rcdg.v26n2.57461.
Jesús Moreno Arriba es Licenciado en Geografía por la Universidad de Salamanca; Doctor en Geografía por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED); Especialista Universitario en Gestión y Conservación de Espacios Naturales por la Universidad de León; Máster en Formación del Profesorado para la Educación Superior en Competencias Docentes y de Investigación por la UNED; y Licenciado-Doctor en Antropología Social y Cultural por la UNED.