Juan Manuel Cano Sanchiz *
Brasil experimentó, en términos generales, una industrialización tardía y basada en los sectores extractivo e agropecuario. Este esquema se repitió en São Paulo, uno de sus estados más ricos e industrializados. En dicho contexto, los ferrocarriles aparecieron en la década de 1860 con una clara vinculación al campo. En la mayoría de casos, el objetivo de las compañías ferroviarias fue favorecer las exportaciones agrícolas, conectando para ello las plantaciones del interior con el Atlántico. Pero el tren se convirtió en seguida en un elemento dinamizador del territorio, agente de urbanización y generador de una clase obrera portadora de nuevos rasgos culturales, muchos de ellos importados.
Surgido de múltiples iniciativas privadas e inconexas, el sector ferroviario entró en crisis a las pocas décadas de comenzar el siglo XX. En 1957, en un intento de recuperar y revitalizar la malla ferroviaria, el gobierno brasileño creó la Rede Ferroviária Federal S.A. (RFFSA). Más tarde, en 1971, las líneas aún operativas en el estado de São Paulo fueron integradas en la empresa pública Ferrovia Paulista S.A. (FEPASA). Ni RFFSA ni FEPASA consiguieron evitar, en cambio, que los caminos de asfalto sustituyeran a los de hierro. Hoy, mientras se debate la vuelta del servicio de pasajeros (que solo existe en el área metropolitana de la capital), apenas unos pocos tramos de la red ferroviaria paulista sobreviven para transportar mercancías.
Con todo, el paso del tren por la historia paulista dejó un valioso legado, tanto material como intangible. Aun cuando una parte importante del mismo se ha perdido, el patrimonio ferroviario paulista sigue constituyendo un documento único para conocer la historia industrial de esta próspera región de Sudamérica. Supone, al mismo tiempo, un elemento de primer orden para generar nuevos recursos.
Estas ideas están en la base del proyecto Memória Ferroviária (MF), que coordina desde la Universidade Estadual Paulista (UNESP) el Prof. Dr. Eduardo Romero de Olivera. Con una trayectoria de más de siete años y una prometedora proyección de futuro, MF puede definirse como un proyecto de investigación transversal consagrado a la experimentación en el registro, la interpretación, la gestión y la activación del patrimonio industrial. Entre sus resultados más relevantes hasta la fecha se cuenta un primer piloto de inventario integral del patrimonio ferroviario paulista, que incluye un tesauro, una base de datos documental e iconográfica y un sistema de información geográfica.
Para cumplir sus objetivos, MF dispone de un equipo interdisciplinar que ha ido creciendo a lo largo de los años, compuesto por historiadores, historiadores del arte, historiadores de la economía, archivistas y documentalistas, arquitectos, turismólogos, geógrafos y otros profesionales vinculados a diferentes universidades e instituciones repartidas por Brasil, Argentina, Cuba, Inglaterra y España.
Nuestra llegada a MF supuso la incorporación de la Arqueología. En una primera fase de trabajo, ejecutada entre octubre de 2013 y marzo de 2014 con apoyo económico de la UNESP, desarrollamos diferentes actividades de intercambio metodológico e interacción disciplinar destinadas a integrar la metodología arqueológica en las herramientas de registro, análisis e interpretación de la cultura material ferroviaria. Al mismo tiempo, ejecutamos un diagnóstico preliminar de uno de los conjuntos objeto de estudio en MF: los talleres que la Companhia Paulista de Estradas de Ferro construyó a partir de la última década del siglo XIX en Jundiaí, ciudad que se sitúa 50 km al NO de São Paulo.
Aquel trabajo era una primera aproximación destinada a reconocer el complejo (que FEPASA mantuvo activo hasta 1998) y a localizar las distintas fuentes disponibles. Se abrieron, con ello, nuevas líneas de actuación. Frentes que desarrollamos desde octubre de 2014 con apoyo económico de la Fundação de Amparo à Pesquisa do Estado de São Paulo (FAPESP, ref. 2014/12473-3).
El proyecto en curso, denominado A ferrovia como agente de globalização: estudo arqueológico transversal do complexo das oficinas da Companhia Paulista em Jundiaí-SP, se articula en dos fases. En la primera, recientemente cerrada, completamos un registro exhaustivo del sector seleccionado como muestra: una parte de los talleres originales de reparación de locomotoras a vapor, en la actualidad abandonada y en proceso de deterioro. Las tareas de registro permitieron recuperar la información contenida en los restos materiales y ofrecer nuevas herramientas de lectura, como una planta que refleja la configuración actual del espacio y varios análisis paramentales realizados con técnicas de Arqueología de la Arquitectura.
La segunda fase, en curso, se apoya en los datos generados durante el registro y en su cruzamiento con la información disponible en las demás fuentes procesadas para reflexionar sobre los ambientes industriales como escenarios de globalización. Se parte, para ello, de una comprensión del espacio basada en una interpretación funcional evolutiva. Encontramos, en este sentido, un complejo diseñado originalmente para operar con vapor, pero que fue creciendo y transformándose a lo largo del tiempo para adaptarse a las necesidades de la empresa (montar y reparar un material rodante procedente en su mayor parte de la importación) y a las innovaciones tecnológicas que marcaron el devenir del sector (como la electrificación y la dieselización).
Todos estos cambios dejaron huellas físicas que pueden leerse, por ejemplo, en los distintos tipos de pavimentos conservados, en los muros de cierre o en las cubiertas. También en los equipamientos que aún se encuentran in situ. Muchos de estos elementos nos hablan de compañías extranjeras, como Brown Bayleys Steel, Arnaud Etienne et Cíe. o The Phoenix Bridge Co. Firmas que conectan los talleres de Jundiaí con Inglaterra, Francia o Estados Unidos, respectivamente, en el marco de un mundo que se hace más pequeño con el avance del telégrafo, los transatlánticos y los ferrocarriles, como señalara Eric Hobsbawm en The Age of Capital y reflejara Jules Verne en Le Tour du monde en quatre-vingts jours.
La industrialización aparece así como un proceso que también puede ser estudiado por los arqueólogos, pues sus vestigios físicos aportan una información tan valiosa como la contenida en los documentos escritos, las imágenes (estáticas o en movimiento) o la memoria oral. Con nuestro trabajo queremos reivindicar la voz de la Arqueología en el estudio del pasado no remoto. Objetivo que cobra especial relevancia en el Complejo FEPASA (poco conocido) y en el contexto brasileño, donde la Arqueología de la Industrialización goza de escaso desarrollo.
Para mayor información:
CANO SANCHIZ, Juan Manuel. Patrimonio ferroviario y arqueología industrial en el estado de São Paulo (Brasil): el Projeto Memória Ferroviária. Anales de Arqueología Cordobesa, 2014/2015, nº 25-26, p. 279-307
[http://www.academia.edu/16341276/Patrimonio_ferroviario_y_arqueolog%C3%ADa_industrial_en_el_estado_de_São_Paulo_Brasil_el_Projeto_Memória_Ferroviária]
* Juan Manuel Cano Sanchiz es becario Post-Doctoral de la FAPESP (grant #2014/12473-3, São Paulo Research Foundation) en la UNESP, campus de Assis. Las opiniones, hipótesis y conclusiones o recomendaciones expresadas en este material son responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la visión de la FAPESP.
FRASE DESTACADA: La industrialización aparece así como un proceso que también puede ser estudiado por los arqueólogos, pues sus vestigios físicos aportan una información tan valiosa como la contenida en los documentos escritos, las imágenes o la memoria oral.