Los paisajes lineales: una nueva representación gráfica de nuestro entorno

Josep M. Panareda* Y Maravillas Boccio**

¿Es posible representar un paisaje y mostrar lo fundamental e importante? Una fotografía evidencia los elementos situados delante, los cuales esconden los ubicados detrás. Un mapa suele ser una generalización excesiva de la realidad. Una pintura o un dibujo convencionales exteriorizan un paisaje interpretado desde una perspectiva determinada.

UN PAISAJE LINEAL ES EL RESULTADO DE UNA INTERPRETACIÓN GEOGRÁFICA DEL PAISAJE Y DE UNA CREACIÓN ARTÍSTICA, ACTUANDO GEÓGRAFO Y ARTISTA CON TOTAL LIBERTAD

He ahí una propuesta de una representación gráfica de los paisajes de manera simple y clara. La esencia del proyecto es combinar dos visiones que deben complementarse, la geográfica y la cartográfica-artística. La clave del éxito es la conjunción de la interpretación geográfica de un paisaje, o conjunto de ellos, con la del artista.

La metodología se basa en la concepción global tanto en la interpretación y como en la representación de los paisajes. Ahí radica su originalidad. No se trata que un geógrafo elabore un esquema gráfico de un paisaje y que traslade dicha información a un cartógrafo, delineante o informático para que lo pase en limpio y resulte bonito. Ni tampoco es la historia de un dibujante o un pintor que pide a un geógrafo que le explique tal o cual paisaje para expresarlo con mayor precisión científica. El producto final debe de ser tan geográfico como artístico, y tan preciso de la realidad del paisaje como comunicativo, al ser resultado tanto de la observación e interpretación del geógrafo como de la inspiración y creatividad del artista.

Perfil lineal del paisaje de choperas en el curso bajo del río Tordera al NE de España. Fuente: Panareda y Boccio.

La representación gráfica utilizada tiene el soporte de un perfil topográfico convencional y al producto final es denominado «paisajes lineales». Los paisajes lineales se definen como representaciones de un territorio a lo largo de un recorrido, basadas en la concepción global de los tipos de paisaje representados, en la simplificación y en la generalización, en donde se ponen de manifiesto las variaciones espaciales, temporales y temáticas, las cuales son expresadas mediante símbolos asociativos, y la diferenciación de la escala de detalle respecto a la interpretación del conjunto. El resultado es una imagen global y sintética de la realidad a una escala determinada.

LOS PAISAJES LINEALES TIENEN UNA GRAN CAPACIDAD DE COMUNICACIÓN AL OFRECER UNA PERSPECTIVA HORIZONTAL DE LA REALIDAD, FRONTAL AL OBSERVADOR

El geógrafo parte de unos objetivos concretos dentro de un plan de estudio de paisaje. Dichos objetivos, territorial y conceptual, son compartidos con el artista. Es conveniente que geógrafo y artista vayan al campo juntos, por lo menos en una ocasión, para que este último tenga los puntos de referencia necesarios para una correcta interpretación de la información geográfica. Sólo de este modo tendrá total libertad en la creación o adaptación de los símbolos y en la elaboración del paisaje lineal sobre el papel.

El artista, con las explicaciones pertinentes, debe considerar la doble escala, la de los elementos y la del producto final. Ahí es donde el artista crea su imagen de los paisajes y la plasma en el perfil. Establece los colores, las formas, los tamaños, la orientación y la composición de todos los elementos a representar. La comunicación geógrafo-artista debe ser fluida ante cualquier cuestión que plantee este último, el cual actúa con total libertad artística y técnica.

Los paisajes lineales no son sólo una simplificación de la realidad y la inserción de símbolos en el perfil de manera mecánica. Se trata de una creación, en la cual geógrafo y artista aúnan sus percepciones de la realidad y sus niveles de abstracción, así como el objetivo final. A su vez, los dos deben ser suficientemente autónomos como para aplicar los métodos y las técnicas correspondientes y elaborar su propia concepción de la realidad. Finalmente deben comunicarse la imagen personal sin perjuicio de la propia evolución.

Para mayor información, véase PANAREDA, J. M. y BOCCIO, M. La expresión gráfica del territorio mediante paisajes lineales: Cuadernos Geográficos, 2012, nº 51, p.78-95. <http://revistaseug.ugr.es/index.php/cuadgeo/article/view/232/223>

*Josep M. Panareda es catedrático jubilado de Geografía Física de la Universidad de Barcelona

**Maravillas Boccio es farmacéutica y doctora por la Universidad de Sevilla, especializada en la ilustración de plantas y paisajes.